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viernes, 1 de febrero de 2013

Se decidirá en Nervión (2-1)

El Sevilla FC ha caído derrotado por dos tantos a uno en el partido de ida de las semifinales de la Copa de S.M. El Rey, que se ha disputado en el Calderón. De esta manera, en un partido muy intenso y con fases muy distintas y repartidas para ambos equipos, el Sevilla logra salir vivo, aunque derrotado y va a provocar que el pase a la final de Copa se decida el próximo 28 de febrero en el Ramón Sánchez Pizjuán.

El partido ha sido muy extraño, con unos bruscos golpes de timón que sólo provoca este deporte llamado fútbol.

Salía de inicio Emery con una novedad sorpresiva en el once inicial, que no era otra que la inclusión de Maduro por Reyes, desplazando de esta manera al croata Rakitic a la banda izquierda. El objetivo estaba claro y no era otro que el de contener a los colchoneros y poner algo más de músculo en la medular en un partido que se preveía que iba a ser intenso no, sino lo siguiente.

Y la primera media hora discurrió así. Con presiones brutales de ambos equipos en campo propio que permitían la recuperación del balón. Como ejemplo, valga que la primera ocasión clara del partido la tuvo el Atlético en el minuto 28 con un disparo raso de Coke que atajaba el debutante Beto, que por cierto, cuajó un buen partido y se mostró seguro y ágil bajo palos y mandando en los balones aéreos que llegaron a su área.

Pero conforme pasaban los minutos, Negredo se iba quedando arriba tan solo como un islote, el balón comenzaba a quemarle a los sevillistas que la perdían ante la presión del rival y las ocasiones de los locales comenzaron a llegar. Y es de los días en los que se agradece que Falcao estuviese ausente, porque a buen seguro que con él en el campo el resultado al descanso no habría sido un empate sin goles.

De esta manera, al descanso llegaba el Sevilla con un magnífico resultado (0-0), máxime si tenemos en cuenta las claras ocasiones falladas por el Atlético en los últimos diez minutos de la primera mitad. Pero había un inconveniente, tanto Spahic como Maduro entraron a la caseta con claras cartulinas amarillas, mientras que la reiteración de faltas de los locales no fue sancionada, por lo que en un partido tan intenso se iba a comenzar la segunda mitad corriendo el riesgo de una posible expulsión.

Sinceramente yo esperaba la entrada de Reyes por Maduro al comienzo de la segunda mitad. El Sevilla estaba necesitado de más hombres que pudieran contener el balón y lanzar o acompañar a Negredo y además se eliminaba el riesgo de expulsión que pesaba sobre Maduro.

Pues cuatro minutos tardó el Sevilla en quedarse con un hombre menos tras la reanudación (min.49). Penalty infantil cometido por el bosnio Spahic por unas manos de patio de colegio que le hacían ver la segunda cartulina amarilla, enfilar el túnel de vestuarios y facilitar el primer gol del partido tras el lanzamiento de la pena máxima convertida por el marrullero, polémico y consentido Diego Costa.

Fueron los minutos en los que tuve las peores sensaciones de la noche. Me temí que la eliminatoria no iba a llegar viva a Nervión. Un Atleti muy agresivo en su casa, con un hombre más, con toda la segunda mitad por delante y con unas ocasiones erradas en la primera mitad que vaticinaban el hundimiento de los hombres de Emery en el minuto 49.

Pues como este deporte es fútbol y cuando muy pocos o casi ninguno dábamos un duro por el Sevilla, apareció la conexión Navas-Negredo (vaya pase del palaciego al estilo Xavi), para que el vallecano picase el balón ante la salida de Courtois y Godín evitase con su brazo el empate sevillista. Nuevo penalty y expulsión, por lo que el partido se equilibraba en todos los sentidos: diez futbolistas en cada equipo y empate a un gol en el marcador (Negredo). Minuto 56.

Y hay que ver lo que una jugada cambia un partido. Fueron los mejores minutos de los sevillistas. Los locales se quedaron muy tocados tras el mazazo del empate y el Sevilla fue claro dominador del encuentro. Con un magnífico Gary Medel que estaba por todas partes (vaya derroche de energías el suyo), se presumí que el Sevilla podía asestar el golpe definitivo, golpe que a punto estuvo de ejecutar Rakitic en el minuto 65 si su disparo desde fuera del área llega a terminar dentro de la red.

Pues como este deporte se llama fútbol, cuando más controlado tenían el partido los visitantes, en el minuto 70 aparece otro veterano y experimentado defensor sevillista, Fernando Navarro, para emular a su compañero de zaga Emir Spahic y volver a cometer otro ingenuo e inadmisible penalty que volvía a poner por delante a los locales con el que sería a la postre el definitivo 2-1.

De ahí hasta el final, destacar que el Sevilla finalizó con nueve futbolistas (min.84) por expulsión de Fernando Navarro (daba igual que la entrada fuese de roja o de amarilla porque ya tenía la cartulina mostrada en el penalty). El entrenador Unai Emery temió que se pudiera aumentar la diferencia y dio entrada a Coke para cubrir el lateral zurdo en lugar de Álvaro Negredo.

Por suerte, el Sevilla salió vivo del Calderón. Derrotado pero vivo. Pudo ser peor y también en fases de la segunda mitad pudo ser mejor. Lo que queda es que con un solo gol en Nervión el próximo 28 de febrero, el Sevilla FC alcanzaría la novena final de la época contemporánea que pensábamos que no íbamos a volver a disfrutar en unos cuantos años.

A buen seguro que el estadio sevillista va a estar a reventar. Desde ya se deben agilizar y articular desde el club los mecanismos necesarios para que el colorido, la animación y el rugir de la Bombonera sevillista recuerde a semifinales disputadas ante el Schalke o el Osasuna en la Europa League. O como ante el Real Madrid de Zidane y Ronaldo cuando Caparrós estaba en el banquillo sevillista.

Esto será dentro de 28 días. En el Sevilla no podrán estar para ese partido Spahic ni Fernando Navarro, aunque es posible que por entonces recupere a Palop y Perotti. En los atléticos, causará baja por idéntico motivo Godín, aunque a buen seguro regresarán Falcao y Raul García.

Será el último día de febrero, el día en el que el Grande de Andalucía homenajee a su comunidad autónoma en tan distinguida fecha y esperemos que sea con el acceso a una nueva final de Copa del rey.

El Sevilla ha salido vivo de Madrid. La misión de acceder a la final no será nada fácil, pero cuanto menos habrá noventa minutos más para intentarlo. Y es que en fútbol, todo es posible.

Buenas noches.

1 comentario:

Miguel dijo...

Dos jugadas ifantiles de jugadores profesionales y experimentados lastran al Sevilla para el partido de vuelta